Hay momentos que pasan tan rápido que el ojo humano no puede apreciarlos en toda su belleza. Uno de ellos es la lluvia golpeando el mar. Gracias a la cámara lenta, podemos convertir una escena cotidiana en algo espectacular, como en esta imagen tomada en la playa de El Camello, Santander, grabada a 240 fotogramas por segundo.
¿Por qué parece que las gotas salen hacia arriba?
Cuando una gota de lluvia impacta contra la superficie del agua, la energía del choque desplaza el líquido hacia abajo y genera una pequeña columna que rebota hacia arriba. A esta columna se le llama chorro de rebote. Este fenómeno dura apenas milisegundos, por eso necesitamos una cámara de alta velocidad para verlo claramente.
En la imagen se aprecia cómo estas gotas “saltan” formando pequeñas esferas que parecen levitar sobre el mar. Un efecto imposible de notar a simple vista, pero que se convierte en arte con la cámara adecuada.
¿Cómo lograr este efecto?
- Usa una cámara capaz de grabar a 240 fps o más. Muchas cámaras deportivas y smartphones de gama alta incluyen esta opción.
- Graba en condiciones de buena luz. La cámara lenta necesita mucha luz para mantener la calidad, incluso si el día está nublado.
- Acércate a la acción. Cuanto más cerca estés del agua, más espectacular será el efecto. Usa una carcasa acuática si es necesario.
- Edita con cuidado. Ajusta el contraste y la nitidez para resaltar las gotas suspendidas en el aire.
Esta técnica no solo es ideal para escenas de lluvia, sino también para salpicaduras, olas y cualquier movimiento rápido que quieras convertir en poesía visual.